Radares dentro de una oferta infinita
Las playlists se convirtieron en una herramienta fundamental para descubrir, consumir y comercializar música en el mundo digital
Desde que los servicios de streaming revolucionaron la industria, un cambio sísmico acompañó el movimiento y la música ya no se distribuye de la misma manera. Ahora, con varias plataformas y millones de oyentes a lo largo de todo el mundo, los canales de distribución se multiplican y las playlists son un pilar fundamental a la hora de construir cualquier estrategia exitosa. Antes, el producto físico dictaba cómo escuchar tu música favorita: identificabas un nuevo álbum, lo comprabas y lo llevabas a tu casa. Si tenías un reproductor portátil, probablemente lo escucharías durante todo el camino. Después lo atesorarías como a una entidad completa: una declaración artística con un principio, un desarrollo y un final. El álbum te contaría una historia, te llevaría de viaje con el artista a un lugar inesperado de su creatividad. Tras el cambio de lo físico a lo digital el mundo es otro: lo que se consume son canciones y cada consumidor puede escucharlas cómo y dónde quiera.
El tesoro oculto detrás de las listas de reproducción
Entender la alquimia de la playlist perfecta es obra de magos o encantadores. Un profano podría creer que las famosas listas son poco más que una serie de archivos multimedia reproducidos secuencialmente o en orden aleatorio; pero no. Las playlists son en realidad, mucho más. Desde que la tecnología digital se impuso y forma parte de la cotidianeidad de cada persona, las canciones se descubren y se reproducen una por una. Ya no están circunscriptas al contexto de un álbum. No sucede así, ya no. ¿Y cuál es la consecuencia de este cambio? Simple: surge la necesidad clara de crear un modo eficiente (orgánico), que permita organizar, categorizar y acceder a miles de millones de canciones. Como casi todos los tesoros, como el valioso recurso de las aguas surgentes, las listas de reproducción se instalaron por sí mismas y se convirtieron rápidamente en una herramienta esencial en la que confían los oyentes, los artistas, las discográficas y los servicios de streaming.
El paisaje actual de la industria discográfica tiene todos los colores de las listas. De hecho, solo en Spotify hay más de dos mil millones de playlists activas. Aunque es común que los ciudadanos de a pie, los famosos e incluso una variedad de marcas creen y compartan sus propias playlists, las más populares suelen ser seleccionadas por las propias plataformas de transmisión. Servicios como Spotify y Apple crearon miles de listas de reproducción personalizadas que cubren todos los géneros, estados de ánimo y circunstancias. Las playlists destacadas que son administradas por curadores suelen tener millones de seguidores. Las estadísticas demuestran que estar incluido en alguna de las playlists patrocinadas por Spotify puede generar un aumento en las reproducciones que varía entre un 50 y un 100 %, con un crecimiento sostenido que, después del push inicial, ronda el 20% continuo. Asegurar un lugar en estas listas puede significar un giro de 180 grados para la popularidad y el éxito de un artista, garantiza la difusión de su perfil y lo transforma en una excelente vidriera para acceder a audiencias nuevas y variadas.
Y por qué son tan importantes
No es fácil dar con el número exacto, pero distintas fuentes de información indican que hay alrededor de 40 millones de canciones para elegir, y por supuesto que cada día se suman nuevas. Descubrir música fresca e interesante dentro de esta oferta prácticamente infinita es una tarea casi titánica. La realidad actual de medios de alta velocidad y acceso instantáneo exige recursos que permitan que los consumidores accedan al contenido deseado sin pasar horas buscando. El interés por la radio continúa decayendo y en simultáneo aumentan la cantidad de personas que se suscriben a distintos servicios de streaming. Esto implica que en cada estrategia de distribución de discográficas grandes, medianas o pequeñas, las playlists son punta de lanza.
Con millones de canciones disponibles a solo un click de distancia, la mayoría de la gente no quiere sentarse y reproducir una por una hasta dar con su próxima obsesión musical. El consumidor promedio necesita saltar ligeramente en un menú de canciones atractivas, emocionantes y pegadizas. Quiere disponer de música que fue elegida a medida, específicamente a su gusto, pero casi sin su intervención y también quiere que sea fácilmente accesible. Las listas de reproducción reúnen de manera precisa todas estas condiciones.
Pandora, un nuevo formato de radio con más de 85 millones de usuarios
Pandora es una plataforma de streaming que permite crear emisoras de radio personalizadas basadas en los artistas o canciones que el usuario prefiera. Cuando el consumidor selecciona una canción o un artista determinado, la aplicación recopila y reproduce automáticamente canciones con características similares.
Music Brokers acaba de cerrar un acuerdo muy importante con Pandora. Y a partir de diciembre de 2022, sus playlists más exitosas serán radios temáticas dentro del servicio. De esta manera, Vintage Reggae Café, Bossanova Chill Out, Jazz Covers Popular Songs, Vintage Café y Lounge (Bar & Café) se transformarán en radios permanentes dentro de la extensa oferta de Pandora. “Nuestros playlists más exitosas son ahora radios temáticas en Pandora y nos sentimos muy entusiasmados por nuestros lanzamientos en la plataforma”, comentó Federico Scialabba, CEO de Music Brokers.
Music Brokers
MB Entertainment Business Group
Federico Scialabba